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La micropigmentación es una técnica estética cada vez más conocida. Se aplica tanto en algunas operaciones de belleza como en casos de recuperación de rasgos faciales tras algunas enfermedades e intervenciones quirúrgicas o por el simple paso de los años. Es importante ser conscientes de que exige algunos cuidados post-tratamiento, para la sanación de la piel evitar la aparición de manchas y conseguir un buen resultado.
Micropigmentación en Mallorca
Es importante que este procedimiento sea realizado por profesionales capacitados para asesorar y garantizar resultados seguros y satisfactorios. También resulta deseable un acompañamiento con sensibilidad y delicadeza en las situaciones en que una persona necesite este tipo de refuerzos.
En este sentido, nos hemos fijado en Grant Ashley en Mallorca, que ofrece todo tipo de tratamientos de micropigmentación con total garantía. Desde microneedling, micropigmentación de cejas, eyeliner, labios, areolas o micropigmentación capilar.
¿Qué es la micropigmentación?
Es bueno saber que hablamos de una técnica poco invasiva para la piel. Por tanto, adecuada tanto para adultos como para personas mayores.
La micropigmentación consiste en la implantación de pigmentos en la capa superficial de la piel mediante agujas finas. Esta técnica se utiliza para mejorar, corregir, reconstruir o realzar ciertos rasgos faciales y corporales, y es especialmente popular en áreas como las cejas, los ojos (delineado de ojos) y los labios.
La micropigmentación se considera semi-permanente, ya que los pigmentos se desvanecen con el tiempo debido a la renovación natural de la piel y la exposición a factores externos como la luz solar. Los resultados suelen durar de dos a tres años, dependiendo del tipo de piel, los cuidados posteriores y el tipo de pigmentos utilizados.
Los beneficios a nivel de mejora de la autoestima son importantes, especialmente en los casos en que se han sufrido las secuelas de una enfermedad. Pero también cuando simplemente se busca mejorar la apariencia física.
Volvemos a recordar que es conveniente ponerse en manos de un centro de micropigmentación acreditado y con buenos profesionales para evitar desagradables sorpresas.
Áreas donde es habitual intervenir
Las zonas de la piel donde es más habitual intervenir son:
- Cejas: Se puede usar para definir, rellenar o crear una forma de ceja más deseada, especialmente para personas con cejas escasas, despobladas o irregulares.
- Delineado de ojos: Ayuda a resaltar los ojos mediante la aplicación de pigmento a lo largo de la línea de las pestañas.
- Labios: Se puede emplear para definir el contorno de los labios y mejorar su color, creando una apariencia de labios más llenos y definidos.
- Cuero cabelludo: Simula la apariencia de cabello para personas con calvicie o pérdida de cabello, creando la ilusión de una cabeza rapada o una mayor densidad capilar.
- Recreación de la areola y pezón. Resulta un tratamiento especialmente importante para mejorar la autoestima en mujeres que hayan sufrido una pérdida completa o parcial de seno a raíz de alguna enfermedad.
- Corrección de cicatrices: Ayuda a disimular al igualar el tono de la piel mediante pigmentos.
Cuidados postratamiento en micropigmentación
Tan importante como el trabajo de un buen profesional, es la implicación del usuario para asegurar una curación óptima y mantener la calidad del pigmento.
Si se siguen las pautas correctas, podremos asegurar un resultado duradero y satisfactorio, reduciendo el riesgo de pequeñas irritaciones, inflamaciones y lesiones cutáneas.
Compartimos a continuación las recomendaciones comunes:
- Evitar la exposición al sol. Se aconseja proteger el área tratada del sol para prevenir la decoloración. Idealmente debemos respetar un periodo de al menos 6 días. Para ello podemos ayudarnos de sombreros y gafas de sol amplias.
- Mantener la piel limpia y seca. Evita el agua del mar o piscina, el sudor y el maquillaje en la zona tratada durante al menos 6 a 7 días. Cuando necesitemos ducharnos hay que evitar el agua caliente sobre la zona tratada.
- Hidratarse correctamente. Usa una buena crema para mantener la zona de la piel hidratada para ayudar en el proceso de curación.
- No rascar o frotar. Es normal que pique un poco o que incluso aparezcan pequeñas costras. En ese caso es mejor dejar que las costras se caigan de manera natural para evitar cicatrices o pérdida de pigmento.
- Evitar piscinas, saunas y deportes agresivos. Hasta que la piel esté completamente curada, se debe evitar actividades que involucren agua clorada o vapor intenso. También aquellos que tengan riesgos de contusiones y golpes o simplemente que provoquen sudoración.
- Evitar el exceso de alcohol, vitamina C y alimentos ácidos en los primeros días. Hablamos de nutrientes que pueden influir en el proceso de pigmentación de la piel.
