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En un post anterior hemos hablado de la importancia de la dieta, la microbiota y el control de la enfermedad de Parkinson. Este es un tema que interesa a los enfermos, pero también a la gran familia de cuidadores y cercanos a los enfermos de Parkinson, que también sufren las consecuencias del deterioro de sus enfermos. También hay un debate sobre la cafeína ¿se puede tomar café ?
Hemos recibido algunos mensajes de lectores que nos preguntan por esto y por más detalles sobre los hábitos con esta enfermedad. Vamos a comentar pues los alimentos prohibidos frente al Parkinson. Y a ver uno de los descubrimientos más interesantes que se han publicado en los últimos años, sobre un nutriente que frena el avance de la enfermedad.
Dieta y Parkinson
Hemos visto que la dieta es uno de los cuatro pilares para controlar la enfermedad. Recordemos algunas pautas generales que vimos sobre la misma:
- Hay que comer cuatro o cinco veces al día. Así distribuimos pequeñas cantidades y evitamos esas pésimas comilonas concentradas en el mediodía y noche, que son poco saludables.
- Es importante dejar un cuarto de lo que nos pongan en el plato cuando comemos fuera de casa. Y en casa servirnos pequeñas raciones. La cultura occidental actual tiene por costumbre servir grandes raciones con un exceso de alimentación. Estamos sobrealimentados especialmente con comida basura.
Alimentos prohibidos con Parkinson
Y ahora concretamente veamos la lista de alimentos prohibidos con Parkinson:
- Carnes rojas. Todas esas carnes que procedan de animales que son la llamada carne roja como la ternera, el buey, cabra, oveja, cerdo, etc.
- Charcutería, tocino, chorizo o cualquier otro derivado de carnes se deben eliminar absolutamente de la dieta.
- Evitar comidas precocinadas. Son alimentos realmente que no debemos de comer. Todo lo que viene plastificado y ya previamente elaborado para meter el microondas o para meterle la sartén.
- Fuera también toda la bollería Industrial todo lo que son dulces elaborados con azúcares refinados
- Tampoco interesa la bollería y pastelería artesanal.
- Refrescos con gas o sin gas. No interesan los refrescos. Ni coca cola, Pepsi cola, fantas, ni ninguna otra marca de bebidas, ni siquiera sin son versiones sin azúcar. Los únicos líquidos para consumir deben ser agua, alguna infusión, algún té e incluso un poco de café por la mañana, si no sentimos que nos altere. Se puede tomar en contra de la opinión que había hasta el momento de que el café pueda ser irritante.
- Nada de bebidas alcohólicas. No se puede tomar una copita de ron, ginebra, etc. Por mucha calidad que tengan.
Parkinson y cafeína
El doctor Haining Zhong, de la Oregon Health & Science University, han descubierto algo que tienen una traducción práctica en el día a día de esta enfermedad.
Publicado en una de las revistas más prestigiosas de salud, Nature, en noviembre de 2022, es un descubrimiento posibilita que frenemos el progreso de la enfermedad de Parkinson.
¿Qué es la dopamina?
La dopamina se ha hecho famosa porque es una de las hormonas asociadas con la felicidad. Está relacionada con el sentimiento de recompensa que sentimos en el cerebro, con el placer y la satisfacción. Pero en este artículo nos interesa porque además, interviene en la actividad locomotora, es decir en el movimiento de los músculos. Y se sabe que cuando aparece el Parkinson, las neuronas que segregan dopamina mueren lentamente. Y la falta de dopamina impide el control del movimiento, porque los nervios no pueden enviar mensajes adecuados a los músculos.
Es decir la falta de dopamina influye en la aparición de la enfermedad.
¿Qué han descubierto el equipo del Doctor Zhong?
Simplificando, han profundizado en el antagonismo de los receptores de la dopamina y la adenosina, En el equilibrio químico del organismo, estas dos sustancias se compensan para que se puede producir el movimiento. Pero en los enfermos de Parkinson se pierde este equilibrio porque hay menos dopamina.
Los test vieron que el desequilibrio químico de estos componente provocó distintos cambios en la actividad neuronal y la locomoción de ratones de laboratorio. Estos resultados sugieren que la adenosina es el intermediario químico que frena la actividad del movimiento, y lo hace porque que frena la dopamina.
Desde un punto de vista práctico, este descubrimiento facilita la creación futura de medicamentos que suavicen la actividad de la adenosina y también que frenen la enfermedad. Pero a corto plazo aparece un nuevo aliado al alcance de todos nosotros. ¡la cafeína!
Y es que los receptores de la adenosina son usados también por esta sustancia que podemos tomar en abundancia diariamente. Al frenar la adenosina, la dopamina disponible en el organismo puede funcionar mejor. Por tanto es importante que los enfermos tomemos café, una, dos o tres tazas de café al día. Lógicamente una dosis que no altere el funcionamiento del sueño. Ya que si alteramos el sueño perjudicamos la enfermedad. Cada uno debe testar hasta qué hora del día puede tomar café sin alterar su sueño.
La recomendación de consumir café de manera diaria es extensible a las personas sanas ya que parece igualmente reducir el riesgo de sufrir la enfermedad.
Si te ha gustado este artículo, te dejamos el vídeo de nuestro colaborador sobre este tema.